Para comenzar el taller, siempre nos contamos qué tal nos ha ido la semana, así compartimos con los compañeros cómo nos hemos sentido.
Después, la sesión se centró en la actividad de «Mi yo de colores». Cada uno dibujó una silueta y lo dividió en 14 huecos. En esos huecos, tuvieron que ir pintando las respuestas (verde, naranja y rojo) dependiendo de si estaban más a favor o no de lo que se les preguntaba. Algunas preguntas fueron: ¿confías en ti mismo?, ¿respetas a los demás?, ¿tienes una alta autoestima?. Una vez acabaron de colorear su yo de colores, estuvimos hablando sobre cada uno de manera individual, para saber qué tiene que mejorar cada uno. Dentro de un tiempo, lo repetiremos a ver si los colores han cambiado.
Para finalizar el taller, cada uno dibujó un corazón y escribió unas bonitas palabras a su compañero de la derecha. así también trabajamos la autoestima y reforzamos el vínculo ya existente entre ellos.
Aquí tenéis unas fotos:
